¡Todos queremos una vuelta al cole sobresaliente! Volver al colegio es un momento muy esperado para la mayoría de los niños. Y para muchos padres…
Observa a los más pequeños de la casa
Muchos padres desconocen los problemas de visión de sus hijos y para detectarlos a tiempo es fundamental extremar la observación de los más pequeños de la casa: cómo ven la televisión, cómo leen, cómo dibujan, si hacen algún movimiento extraño con los ojos o con la cabeza, si lagrimean, si tienen los ojos rojos … todos estas señales nos pueden dar muchas pistas sobre cómo es la visión de los niños. No debemos olvidar que el 80% de lo que aprenden lo hacen a través de la vista, mientras antes detectemos los problemas antes podremos solucionarlos, cuando nacemos nuestro sistema visual no está maduro y evoluciona de forma gradual hasta los 7 u 8 años de edad.
En algunos casos, una vez detectados los problemas oculares, entre los 8 y los 12 años se puedan encontrar casos en los que la miopía se desarrolla a una velocidad no deseada. Suelen ser casos donde es probable que los padres tengan precedentes en el desarrollo de este defecto refractivo. En ese caso se hace necesario realizar trabajos de «Control de Miopía».
Existen casos muy extendidos en el mundo como en el caso de Taiwan, donde el porcentaje de niños miopes va avanzando cada año.
Es importante saber que la miopía severa es un problema de salud importante porque además de producir discapacidad visual, está también relacionada con un mayor riesgo de desprendimiento de retina.
Para una vuelta al cole sobresaliente
La buena salud ocular general es vital para el aprendizaje
- Además de las revisiones iniciales en los bebés, la Academia recomienda una revisión en la edad preescolar y al entrar en el colegio. Estas revisiones luego deben ser periódicas para llevar un control exhaustivo de la evolución ocular de los más pequeños.
- Es aconsejable conocer y comunicar al oftalmólogo los antecedentes de salud ocular de la familia. Todo el mundo debería averiguar si en su familia hay afecciones oculares. Los padres deben comentar esta información con la persona que lleve a cabo la revisión siempre que sea posible. Entre los ejemplos de afecciones oculares frecuentes se incluyen la miopía, el estrabismo, el ojo vago.
- Los padres deben estar alertas para detectar síntomas que podrían indicar que existe un problema, como por ejemplo cansancio ocular, dolores de cabeza, desviación del ojo. Otros síntomas que deben observarse son una coloración blanca o grisácea en la pupila, ojos que no pueden seguir el movimiento, desviaciones…etc.
- Cuidado y precaución con la práctica deportiva, puede incluso considerar el hacerles unas gafas protectoras certificadas.