La emergencia que vivimos desde el pasado mes de marzo por el coronavirus tiene repercusiones que van más allá de las cuestiones sanitarias. Las implicaciones son políticas, económicas, sociales… y son muy graves en el terreno medioambiental. Intentamos impedir el contagio con mascarillas, guantes, desinfectantes… y perdemos el control sobre el impacto que toda esta protección tiene en lo que nos rodea.
En un principio, durante el confinamiento, disminuyeron los desechos por el descenso generalizado del consumo, pero ahora, a la vuelta del consumismo le hemos sumado la contaminación por productos sanitarios de todo tipo.
El pasado 3 de julio se celebró el Día Internacional Libre de bolsas de plástico. El 2021 iba a marcar el final de los plásticos de un solo uso. Parecía que el fin de este tipo de contaminación estaba cerca. Cuando estábamos a punto de iniciar la puesta en marcha de estas medidas, todo se paraliza y volvemos si cabe con más fuerza a lo de antes ¿Es que acaso los residuos no degradables han vuelto para quedarse? Hemos pasado de la concienciación al “sálvese quien pueda”.
¿Se puede hacer una medicina verde?
Las preguntas que podemos hacernos ante la necesidad de estos productos sanitarios y de la protección que nos brindan es: ¿Se puede hacer una medicina verde? ¿Podemos protegernos, cuidar nuestra salud y cuidar del medioambiente? El doctor Federico Alonso Aliste, Director Médico de Tecnolaser, piensa que este es un objetivo posible y alcanzable.
Somos una clínica oftalmológica líder en cirugía refractiva que destaca como centro innovador y avanzado en cuanto a tecnología, tratamientos e investigación. Adelantándonos a la nueva situación motivada por el coronavirus hemos realizado un análisis de la cantidad de pijamas, batas, guantes, papis, mascarillas, botes de gel hidroalcohólico, toallitas de limpieza etc. que consumimos tanto los profesionales sanitarios como los pacientes. Los datos que salieron de esa “auditoría voluntaria medioambiental” nos han hecho replantearnos tanto la política de compra de material como de eliminación de estos residuos.
Un 400% más de residuos
Hemos multiplicado los resultados obtenidos por la inmensidad de procedimientos clínicos que se realizan sistémicamente de forma continuada y hemos llegado a la conclusión de que el tema es muy preocupante. Comparando nuestra actividad con la de un entorno global. Hemos contactado con instituciones especializadas que ya analizan estos temas, y nos han informado que desde el mes de marzo estos residuos han aumentado en un 400%.
Los ecologistas ya alertaban antes de la pandemia de la amenaza que representa el aumento de la contaminación para el mundo. Según una estimación del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, hasta 13 millones de toneladas de plástico van a los océanos cada año. Al Mediterráneo llegan 570.000 toneladas anuales, lo que, equivale a tirar 33.800 botellas de plástico al mar cada minuto.
Todas las Comunidades Autónomas tienen plantas de tratamientos de residuos sanitarios, que una vez esterilizados se gestionan como residuos parecidos a los que se gestiona a nivel municipal. La preocupación que surgió desde la dirección de Tecnolaser era si estos centros iban a ser capaces de soportar la alta demanda de su actividad.
Estándares de calidad y seguridad
En Tecnolaser Clinic Vision pensamos que para solucionar este impacto medioambiental hay que hacer algo más que implementar las medidas de seguridad básicas y hemos decidido que lo mejor es hacer una óptima gestión en la utilización de los recursos para seguir manteniendo unos estándares de calidad y seguridad muy elevados.
Una de las propuestas de mejora en calidad de la empresa, y que llevamos implementando desde hace varios meses, es conseguir una menor utilización de papel. En los últimos años, la mitad de los bosques y selvas del mundo han sido destruidos y más del 75% de los restantes están en muy malas condiciones. De la madera procesada el 40 % se utiliza para fabricar papel, del cual sólo se recicla el 35 %. Por otro lado, el 25 % de los gases invernadero se producen en el procesamiento de la industria papelera.
«Si puedes, mejor sin papel»
Una vez analizados los datos: desechos, gasto en papel, contaminación, gases… En Tecnolaser Clinic Vision hemos decidido hacer algo para mitigar en lo posible ese impacto nocivo del que todos somos indirecta e inevitablemente responsables y hemos acelerado el propósito inicial de un menor uso de papel en la Clínica. El objetivo tiene lema: “SI PUEDES, MEJOR SIN PAPEL”.
Para conseguir este objetivo de responsabilidad medioambiental y en el marco de un proyecto mayor de digitalización, todas las exploraciones oftalmológicas que se realizan y todos los informes médicos son entregados al paciente, previa autorización, en tiempo real en sus correos electrónicos. Además, también reciben mediante un enlace enviado por SMS, toda la información necesaria sobre cualquier procedimiento quirúrgico y preoperatorio.
Valoración positiva de pacientes
Más del 90 % de los pacientes de Tecnolaser Clinic Vision han valorado muy positivamente esta iniciativa. La clínica les trasmite la necesidad de ser solidarios con el medio ambiente en un momento tan delicado como este en el que todos somos generadores de residuos de forma casi constante.
El objetivo inmediato es llegar en este año, salvo excepciones puntuales, a ser una Clínica Oftalmológica, 100% libre de papel.
Somos una empresa 100% andaluza que apuesta por una sanidad privada de calidad con una filosofía muy concreta sobre la atención a los pacientes: el paciente es lo primero y al paciente se le ofrece lo último y lo mejor, tanto en atención como en tecnología. Ahora, además de ser desde Sevilla un centro de referencia nacional en el mundo de la oftalmología seremos también uno de los centros pioneros en el nuevo concepto de MEDICINA VERDE.
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