¿Sabías que actividades tan sencillas como jugar al aire libre ayuda a disminuir las posibilidades de padecer miopía en los niños?
En la actualidad, nuestros hijos tienen unos hábitos totalmente distintos a los que teníamos nosotros a su edad.
Los videojuegos, los ordenadores e internet han dejado de lado a los juegos en el parque o fuera de casa. En relación al riesgo de desarrollar miopía, está demostrado que olvidar los juegos tradicionales en la calle y concentrarse en juegos que nos encierran en casa es una costumbre bastante perjudicial.
Investigaciones sobre cómo evitar la miopía
Diversas investigaciones nacionales e internacionales apoyan esta teoría de la necesidad de que los niños jueguen al aire libre.
El estudio CLEERE sobre miopía infantil realizado en la Universidad Estatal de Ohio revela que un 60% de los niños hijos de padres miopes terminarán desarrollando esta patología a no ser que realicen al menos 5 horas de juegos y actividad al aire libre a la semana. Si conseguimos que nuestros hijos aumenten a 2 horas diarias su estancia fuera de casa, el riesgo se reduce hasta un 20%.
En España también se han realizado investigaciones al respecto. Algunas exponían que los niños que pasan demasiado tiempo en el interior de casa, jugando con pantallas a distancias cortas sufren efectos negativos en su visión.
En nuestro país, el 73% de los niños pasa menos de 5 horas diarias al aire libre, y de éstos, 4 de cada 10 son miopes. Por estos datos, la relación entre miopía con la ausencia de actividad al aire libre del niño es evidente.
Conclusiones sobre el desarrollo de la miopía en niños
Como conclusión, debemos decir que hay numerosos factores, incluidos los genéticos, sobre los que no podemos influir decisivamente y aumentan las posibilidades de nuestros hijos de desarrollar miopía infantil. Sin embargo, también hay otros que podemos controlar y que pueden ayudar a que los niños no resulten miopes, y por lo tanto no tengamos que tomar decisiones posteriores como la cirugía.
Las actividades de toda la vida fuera de casa, hacer deporte, ir al parque o pasear son saludables para nuestros hijos a muchos niveles, y según demuestras muchos estudios sobre miopía, también para sus ojos:
- Pasar tiempo al aire libre no frena el crecimiento de la miopía pero está demostrado que sí puede retrasar su aparición.
- La miopía puede reducir la participación del niño en distintas actividades, como practicar deporte. Existen otras correcciones además de las gafas.
- El incremento de miopía puede suponer problemas serios para la salud visual en el futuro
Por todo esto …
¡Niños, a la calle a jugar!